Reloj de arena
Página 1 de 1.
Reloj de arena
Un hombre se dedicaba
a contar granos de arena
de un reloj que se encontraba
encadenado a su pierna.
El reloj le obsesionaba
lo observaba noche y día
cada grano escudriñaba
buscando en él su utopía.
Y es que antaño una hechicera
le había profetizado
que, entre tanta arena yerma
una estrella había anidado.
Y si sabía buscarla
en su desierto de cristal
eclosionaría en alba
de brillante luz celestial.
En la sombra de su torre
el hombre desesperaba
pues el mismo oscuro cobre
cada grano coloreaba.
Una tarde, como tantas,
bajó al pueblo más cercano
buscando adquirir viandas
para su encierro ermitaño.
Se desató una tormenta
que le obligó a refugiarse
en la venta de la aldea
hasta que al fin amainase.
Durmió allí y, a la mañana
despertó sobresaltado
su viejo reloj brillaba
cual orbe de luz dorado.
Cada grano era una estrella
y el reloj un universo
oprimido en la trémula
mano del hombre perplejo.
Un rayo de sol ya toca
las esferas transparentes
y con su luz contagiosa
cada grano muerto enciende.
Cada grano era una estrella
con sed de luz simplemente
soñando en su larga espera
hilos de oro y blanca nieve.
a contar granos de arena
de un reloj que se encontraba
encadenado a su pierna.
El reloj le obsesionaba
lo observaba noche y día
cada grano escudriñaba
buscando en él su utopía.
Y es que antaño una hechicera
le había profetizado
que, entre tanta arena yerma
una estrella había anidado.
Y si sabía buscarla
en su desierto de cristal
eclosionaría en alba
de brillante luz celestial.
En la sombra de su torre
el hombre desesperaba
pues el mismo oscuro cobre
cada grano coloreaba.
Una tarde, como tantas,
bajó al pueblo más cercano
buscando adquirir viandas
para su encierro ermitaño.
Se desató una tormenta
que le obligó a refugiarse
en la venta de la aldea
hasta que al fin amainase.
Durmió allí y, a la mañana
despertó sobresaltado
su viejo reloj brillaba
cual orbe de luz dorado.
Cada grano era una estrella
y el reloj un universo
oprimido en la trémula
mano del hombre perplejo.
Un rayo de sol ya toca
las esferas transparentes
y con su luz contagiosa
cada grano muerto enciende.
Cada grano era una estrella
con sed de luz simplemente
soñando en su larga espera
hilos de oro y blanca nieve.
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
|
|
Jue Mayo 30, 2019 6:50 pm por Mpcmartinez
» Carta abierta a la Dirección del Hospital Rafael Méndez de Lorca
Vie Feb 23, 2018 12:00 pm por icaro100
» Precinto de vehiculo
Lun Feb 19, 2018 12:33 pm por braveherat5
» Confesiones de un verdugo
Dom Dic 03, 2017 7:07 pm por icaro100
» Reloj de arena
Sáb Ago 19, 2017 9:55 pm por icaro100
» Futuro
Dom Mayo 14, 2017 9:41 am por icaro100
» Instante
Jue Mayo 04, 2017 11:26 pm por icaro100
» El presidente de Murcia abre su corazón
Miér Mayo 03, 2017 10:37 pm por icaro100
» Parada
Dom Abr 30, 2017 12:29 pm por icaro100
» Civil II con Miguel Navarro Castro
Miér Feb 08, 2017 4:53 pm por laurita13698