El 15 de diciembre vota en las elecciones a delegado de Facultad para que otros no decidan por ti

Hay ciertas cosas que, a los pocos meses de entrar en nuestra Facultad, uno termina asociándole ineludiblemente. Es común que, cuando un profesor actúa arbitrariamente con un compañero, la mayoría susurre un "menos mal que no me ha tocado a mí, vamos a no cabrearlo más no vaya a putearnos a nosotros". Es normal sentarte en uno de esos potros de tortura a los que llaman bancos adosados soltando un resignado "vaya mierda de asiento, a ver si mango una silla de la clase de al lado". Es normal encontrar a compañeros de cuarto diciendo "sólo me queda un año para irme de este maldito sitio y no volver". Es normal llegar a ese curso y, cuando te preguntan qué es la delegación, responder "pues no tengo ni idea, en los 4 años que llevo aquí no los he visto en mi vida". Es normal resignarse ante cualquier carencia, incomodidad o abuso que nos impongan, pensando que no se puede hacer nada por evitarlos y que cualquier queja sólo va a empeorar la situación y provocar que nos enfilen y nos hagan la vida imposible lo que nos queda de carrera. También es normal que en las elecciones a delegado de facultad no vote ni Dios. Todo ello va relacionado...hasta el punto de que esto último es una de las grandes causas de toda la mierda antes descrita.

Muchos ven la universidad como el lugar donde conseguir un título que te permita ganar dinero. Da igual en qué condiciones lo hagas, da igual lo que efectivamente aprendas, lo preparado que salgas; da igual lo que te puteen, las veces que tengas que arrastrarte, dan igual las oportunidades de crecer como persona, formarte un espíritu crítico, comprender lo que quieres hacer con tus conocimientos, aprender a luchar por tu dignidad...que pierdas. Muchos conciben esto como un vertedero donde nosotros somos ratas cuya postura debe ser reptar entre la basura y escapar del peligro...que se supone es lo que debemos hacer durante nuestra futura vida laboral.

A mucha gente le resulta utópico entender la universidad como un lugar donde cambiar el más vil instinto de supervivencia por el deseo de vivir con la cabeza bien alta. Un sitio donde se nos respete, donde nuestros derechos sean la ley, donde se fomenten los valores más nobles de la Humanidad, donde se nos permita aprender y estudiar en condiciones dignas. Un sitio donde se aprenda a ser profesional...y persona. Esa gente desencantada olvida las herramientas para cambiar la universidad que ganaron nuestros padres para nosotros...olvidan la democracia.

Olvidan que a fuerza de luchar hemos logrado tener representantes en los órganos de gobierno de la universidad, que mediante la manifestación y la huelga podemos mostrar ante cualquier abuso que somos el alma y la razón de ser de esta institución. Olvidan que, organizados, somos un factor determinante en la construcción de una universidad digna y para todos. Pero hace falta que queramos luchar.

Este martes 15 de diciembre podemos tomar el control de los órganos que deberían representarnos y ponerlos a nuestro servicio. No nacieron para pudrirse, sino para ser usados...y para eso hace falta nuestro voto. Votad para regenerar la delegación, votad para poder seguir votando cada día del año, para que vuestra voz sea oída en cada momento y fundamente cualquier decisión de vuestros representantes. Este año tenemos la posibilidad de construir una democracia real en la Facultad, donde el alumno sea informado y consultado, y donde su voluntad sea el único discurso de la delegación. El próximo martes, con el simple acto de depositar un voto, podemos lograr un arma que, usada durante todo el año, será la mejor garantía de combate contra cualquier abuso y arbitrariedad, empezando por las indignas condiciones de los estudiantes del grado. Todo depende de que, a la hora de las elecciones, permanezcáis en clase y, perdiendo media hora de vuestro tiempo, ganéis un año entero de dignidad y futuro. Tu voto es decisivo...úsalo, por ti y por tus compañeros.

Yo he perdido la fe en la universidad. La perdi desde el primer año. Durante el tiempo que llevo en ella he podido comprobar, como autenticos patanes se sacan carreras como si esto fuese un curso mas de la ESO. He visto como autenticos MENTIROSOS y aprovechados, hacen usos de las mas rastreras artimañanas para obtener tratos de favores. En definiitva, he visto de todo.

Por eso opositare. Por eso le dare la maxima utilidad al titulo universitario, ya que para las oposiciones al grupo A y B te lo exigen como requisito ineludible. Aquellos que no opositen seguiran viendo como autenticos trepas siguen jodiendo la marrana. Mientras tanto yo estare tomandome un cafecito. Viva yo.

Esa es la mazmorra apestosa que hemos construido durante años dejando la delegación en manos de indecentes que sólo la usan para hacer carrera y tirando a la basura nuestras oportunidades de convertir este sitio en lo que debería ser. Si el decanato expulsa arbitrariamente a 200 compañeros de una optativa a mitad de curso (eso lo viví yo) y el delegado de facultad es un advenedizo que se pone del lado de la decana, esos compañeros habrán perdido oportunidades valiosísimas de oponerse a la injusticia que les han impuesto. Si, en cambio, tienen una delegación honesta y democrática, la decana se pensará mucho lo que hace...porque al día siguiente puede encontrar su foto en La Verdad y un recurso ante la autoridad superior. Eso también podemos lograrlo organizándonos por nuestra cuenta, pero está claro que el poder y la representatividad que se concede a la delegación es un instrumento que no podemos desperdiciar pues, si no está en nuestras manos, nos va a quitar mil posibilidades de lucha...y si está en manos de lacayos, el perjuicio que nos causará será inmenso. Por eso hay que organizarse, votar a la alternativa al servilismo infame de defau y luchar durante todo el año con todos los medios a nuestro alcance...empezando por la delegación.

Eso no tiene nada que ver con lo que yo dije, pelotudo.

Macho a ti te digo que ayer vi una cebra homosexual y tambien le echas la culpa a la delegacion.


edit, quizas mi anterior mensaje deba ir en otro hilo. Creare uno a tal efecto.

Claro que tiene que ver! El mamoneo, la discriminación, los tratos de favor, la falta de calidad en las aulas...son consecuencias de la visión que los de arriba tienen de nosotros: un monton de gente descoordinada, que no tiene conciencia de grupo, donde cada uno va a su bola...y representada por los más pelotas y arribistas del lugar. Así es imposible que no nos vean como ganado y abusen de nosotros.